Durante las noches de este fin de semana se registraron nuevos hechos de vandalismo en distintos puntos de la ciudad. Grupos de jóvenes estarían retirando las tapas de los medidores eléctricos para luego arrojarlas a pocas cuadras, provocando serios inconvenientes a los vecinos.
Más allá de la molestia por los trámites que deben realizarse ante la Cooperativa Eléctrica para reponer las tapas, la principal preocupación radica en el peligro que implica dejar los cables al descubierto, con el riesgo de accidentes eléctricos.
En una cuadra de calle Pellegrini se constató la falta de numerosas tapas, mientras que en la zona sur, sobre calle San Luis, se detectaron alrededor de diez viviendas afectadas por la misma situación.
Las autoridades piden a los vecinos denunciar estos actos, que lejos de ser una travesura, constituyen un claro hecho de vandalismo.




