Tragedia en Córdoba: El Dolor que Traspasa Generaciones
En una sucesión de acontecimientos desgarradores que han sacudido la ciudad de Córdoba, un niño de 13 años fue encontrado sin vida dentro de un congelador en su propia casa. La trágica escena se desencadenó en las primeras horas del miércoles en una residencia situada en la calle 28 de Julio al 3780, en el barrio Panamericano de la capital provincial.
Según reportes de fuentes policiales a Infobae, el hallazgo del cuerpo del niño desencadenó una respuesta inmediata de los servicios de emergencia, quienes trasladaron al menor al Hospital de Niños la Santísima Trinidad. A pesar de los esfuerzos del personal médico por revivirlo, lamentablemente no lograron salvar su vida.
Belén, la madre del niño, visiblemente afectada por la tragedia, compartió detalles desgarradores de aquella noche fatídica. En una entrevista con el noticiero “Arriba Córdoba”, relató cómo descubrió a su hijo en el congelador de la casa y rememoró los últimos momentos que compartieron juntos. Entre sollozos, compartió: “Se despidió porque cuando le dije ‘papá, no me dejes sola’, él abrió los ojos como diciendo ‘déjame'”.
Belén también sugirió una posible causa de la muerte de su hijo, especulando que “se metió bañado al congelador, lo agarró la corriente y no pudo hacer más nada”.
Por otro lado, la abuela del niño reveló que el congelador donde ocurrió la tragedia había sido adquirido de un negocio que cerró hace algún tiempo. Aunque aseguró que el electrodoméstico “estaba vacío y apagado”, admitió la posibilidad de que el niño lo haya enchufado accidentalmente.
El drama alcanzó proporciones aún mayores cuando, durante una entrevista radial en vivo, la bisabuela del niño sufrió un infarto al enterarse de la trágica noticia. Vecinos y familiares se vieron obligados a solicitar ayuda mientras la entrevista continuaba en el aire.
La mujer, de 85 años y postrada en cama, falleció a causa del paro cardíaco. Según confirmaron las autoridades, ambos incidentes están siendo investigados para esclarecer las circunstancias que rodearon estas dolorosas pérdidas, dejando una huella indeleble de dolor que trasciende generaciones en la comunidad cordobesa.
