Javier Milei Rompe Protocolo: Un Valiant III por las Calles del Cambio

En un gesto inesperado que rompe con las tradiciones protocolares, el presidente electo Javier Milei decidió marcar su entrada a la Casa Rosada de una manera única y emblemática. En lugar de optar por el icónico “Cadillac de Perón”, la elección recae sobre un vehículo que encapsula la nostalgia y el esplendor de la industria automotriz argentina: el Valiant III descapotable.
Este modelo, fabricado por la Chrysler Corporation a partir de 1964 en territorio argentino, es más que un simple automóvil. Con un tanque de nafta de 68 litros y una longitud que supera los 5 metros, el Valiant III se convirtió en un fenómeno en las calles argentinas y dejó una marca indeleble en el mundo del automovilismo, compitiendo en el prestigioso Turismo Carretera.
Los fanáticos de los autos clásicos seguramente apreciarán la elección de Milei, ya que el Valiant III representa no solo la habilidad técnica de la época, sino también la pasión y el ingenio que caracterizaban a la industria automotriz nacional. Aunque la producción de estos vehículos llegó a su fin en 1968, su legado persiste, alimentando la admiración de los amantes de los autos clásicos.
Este cambio de paradigma en la elección presidencial de vehículos no solo resalta la singularidad de Milei, sino que también apunta a revalorizar y celebrar el patrimonio automotriz argentino. En un país donde la historia de los autos clásicos se entrelaza con la identidad nacional, la decisión del presidente electo se presenta como un guiño al pasado y, al mismo tiempo, como un paso audaz hacia el futuro.