Femicidio tras una discusión por un perro: La aberrante justificación de un crimen

En un trágico suceso en la ciudad de Santiago del Estero, Alfonso Agüero, un hombre de 78 años, asesinó a golpes a su esposa, Tranquilina Conteras, de 72 años, tras una acalorada discusión originada por un incidente con su perro. La brutalidad del ataque dejó a Conteras en el suelo, en medio de un charco de sangre. Agüero, después de la agresión, intentó quitarse la vida ingiriendo soda cáustica pero fue rescatado a tiempo por la policía, mientras que su esposa sucumbió a sus heridas horas más tarde en el hospital.

El único testigo del atroz suceso fue el nieto de la pareja, quien llamó a las autoridades en un intento desesperado por evitar el desenlace fatal. Los agentes llegaron al hogar compartido por Agüero y Conteras justo a tiempo para salvar al agresor, pero ya era demasiado tarde para la mujer.

El incidente se desencadenó a raíz de un altercado con su perro alrededor de las 6.30 de la mañana. Conteras, en un acto de reprimenda, agredió al animal con un cable, lo que desencadenó una violenta confrontación verbal. La situación se tornó física cuando Agüero intervino en defensa del perro, y en cuestión de minutos, la discusión escaló hasta llegar a la brutal agresión en la que utilizó un hierro y un palo para golpear a su esposa hasta dejarla inconsciente en el suelo.

El arrebato de ira del septuagenario pareció disiparse antes de la llegada de la policía. Al percatarse de la gravedad de sus acciones, Agüero intentó quitarse la vida ingiriendo un líquido tóxico. Afortunadamente, los agentes intervinieron y lo trasladaron rápidamente a un hospital, donde se encuentra recuperándose. Sin embargo, Conteras no tuvo la misma suerte y falleció a causa de las heridas sufridas.

La investigación del caso está a cargo de la fiscal Cecilia Gómez Castañeda, de la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar, quien se hizo presente en la escena del crimen junto a los peritos de Criminalística. En el lugar se encontraron pruebas del ataque, incluyendo un hierro ensangrentado que se presume fue utilizado como arma homicida, un palo y la botella de soda cáustica que Agüero empleó en su intento de suicidio.

Este terrible suceso pone de manifiesto la trágica culminación de una historia marcada por la violencia, en la que Conteras previamente había denunciado a Agüero en 2019 y se habían separado durante un tiempo, antes de una reconciliación que condujo a este desenlace fatal.