El Gobierno reduce el impuesto PAIS y busca una baja en los precios, aunque el sector privado muestra escepticismo

El Gobierno ha anunciado una serie de medidas para incentivar la reducción de precios en el mercado, destacando la reducción del impuesto PAIS y la eliminación de trámites burocráticos. Sin embargo, el sector privado relativiza el impacto de estas políticas, señalando que la caída en la demanda y la estructura de costos actuales dificultan una baja inmediata en los precios.
A partir de hoy, la alícuota del impuesto PAIS para la importación de bienes y servicios regresa al 7,5%, un nivel que no se veía desde antes de la llegada de Javier Milei a la presidencia. Esta medida, acompañada por la eliminación de retenciones de IVA y Ganancias en pagos electrónicos, busca reducir los costos y promover la desinflación. Sin embargo, el sector privado, especialmente en la industria alimentaria, no espera una baja significativa en los precios a corto plazo, aunque sí podría frenar nuevos aumentos.
Gabriel Caamaño, socio gerente de la consultora Ledesma, sostiene que la rebaja del impuesto PAIS podría tardar en reflejarse en los precios debido al proceso de importación y la falta de márgenes operativos en algunas empresas. Por su parte, un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) estima que la reducción del impuesto podría impactar en los precios finales entre un 1,14% y un 3,4%, dependiendo de la estructura de costos de los bienes.
En paralelo, el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado reportó una baja en los precios de bienes expuestos al comercio internacional tras la eliminación del Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA). No obstante, sectores como el textil atribuyen esta baja principalmente a la caída en la demanda, más que a los cambios en las políticas de importación.
La medida fue oficializada en el decreto 777/2024, publicado este lunes en el Boletín Oficial, con el objetivo de profundizar el sendero de desinflación. Sin embargo, desde el sector privado advierten que los precios los fija el mercado y que es incierto cómo y cuándo estas políticas se traducirán en menores costos para los consumidores.