El Gobierno no impugnará la sesión que expulsó a Kueider del Senado pese a la interna con Villarruel

A pesar de que el presidente Javier Milei calificó como inválida la sesión en la que se decidió la expulsión de Edgardo Kueider del Senado, el Gobierno nacional no impulsará la nulidad de la votación. Así lo confirmó el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien explicó que el procedimiento para impugnarla es complejo y requeriría iniciar un litigio en el fuero contencioso administrativo.
La sesión, presidida por la vicepresidenta Victoria Villarruel mientras ejercía interinamente el Poder Ejecutivo en ausencia de Milei, fue motivo de tensos cruces entre ambos. Villarruel encabezó la votación que determinó la destitución de Kueider por inhabilidad moral, en un contexto marcado por las divisiones internas del oficialismo y el rechazo de algunos sectores.
Por su parte, Kueider, quien se encuentra detenido en Paraguay tras ser sorprendido con 200 mil dólares sin declarar, presentó un amparo ante la Cámara Contencioso Administrativa. En su presentación, cuestiona la validez de la sesión argumentando que Villarruel no debió presidirla debido a su doble rol, algo que, según su defensa, vulnera la Constitución Nacional. También reclamó la falta de una comisión para tratar su caso y denunció que no se le permitió ejercer su derecho a la defensa, en contravención al reglamento del Senado.
El debate sobre la legitimidad de la expulsión genera diferencias incluso dentro del propio Ejecutivo. Según fuentes cercanas, una eventual nulidad de la votación podría retrasar la asunción de la senadora Stefanía Cora, quien reemplazaría a Kueider. Cora, alineada con Cristina Kirchner, podría alterar el equilibrio de fuerzas en el Senado, permitiendo al bloque de Unión por la Patria alcanzar quórum propio.
Por ahora, la postura del Gobierno de no avanzar con la nulidad ofrece una ventaja estratégica al oficialismo. Sin la presencia de una senadora del bloque de oposición, Unión por la Patria puede operar en el Senado sin depender de alianzas circunstanciales para las próximas votaciones clave.