
El Gobierno nacional oficializó este viernes la desvinculación de 343 trabajadores pertenecientes al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), al Instituto Nacional de Semillas (INASE) y al Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), medida que alcanzó incluso a empleados de planta permanente.
La decisión, publicada en el Boletín Oficial mediante la resolución 1240, se enmarca dentro de la reestructuración y transformación de distintos organismos estatales. Según lo dispuesto, el INTA dejó de ser un ente autárquico y pasó a funcionar como organismo “desconcentrado” bajo la órbita de Agricultura; el INASE fue disuelto y el INV reestructurado. Además, se limitaron licencias, comisiones de servicio y asignaciones transitorias.
El Senado había rechazado en la última sesión los decretos delegados que otorgaban al presidente Javier Milei facultades para avanzar en estas reformas, entre ellos el decreto 462/2025, que dispuso cambios en la estructura del INV y del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
Desde el Ejecutivo argumentaron que el INTA “se había desviado de su propósito original, siendo utilizado como herramienta de militancia política y alineado con la Agenda 2030, en lugar de enfocarse en las verdaderas necesidades del sector agroindustrial”.