La situación industrial en Córdoba atraviesa uno de sus momentos más difíciles. El modelo económico impulsado por Javier Milei, con apertura total de importaciones y una fuerte contracción del mercado interno, está afectando de lleno a fábricas, PyMES y comercios locales.
El consumo interno cayó abruptamente y la entrada masiva de productos importados dejó a la industria en jaque. Electrolux extendió la suspensión de 400 trabajadores por falta de demanda, mientras que Mabe cerró su planta en Río Segundo, dejando a decenas de familias sin trabajo.
En Rosario, la planta de Electrolux también sufrió suspensiones rotativas ante la falta de ventas, y la situación se replica en otras empresas como Acindar, que aplicó medidas similares.
La consecuencia es clara: menos producción, menos empleo y menos consumo. Córdoba, que históricamente fue un motor industrial del país, hoy ve cómo su entramado productivo se debilita mientras crece la importación de bienes extranjeros.
Fuente Rioja Noticias




