Aterrizaje Exitoso: Avión Sin Ruedas en Australia
En un asombroso acto de destreza y calma bajo presión, un avión bimotor logró aterrizar sin ruedas en el aeropuerto de Newcastle, al norte de Sídney, Australia. El Beechcraft Super King Air, pilotado por Peter Schott, junto con dos pasajeros a bordo, enfrentó una situación desafiante el pasado lunes cuando el tren de aterrizaje no respondió.
La odisea comenzó cuando el avión despegó de Newcastle con destino a Port Macquarie. Sin embargo, apenas iniciado el vuelo, el piloto informó sobre “problemas con el tren de aterrizaje”, lo que desencadenó una serie de eventos que mantuvieron en vilo a todos los presentes.
Durante casi tres horas, la aeronave circuló sobre el aeropuerto, mientras el piloto, con una experiencia de vuelo que se remonta a décadas, maniobraba para quemar combustible y evaluar la situación. Schott, de 53 años, quien ha estado en los cielos desde la adolescencia, mostró una serenidad impresionante frente a los desafíos, incluso con factores como el mal tiempo y la presencia de pelícanos en el área.
Finalmente, en un acto que fue descrito como “sacado de un libro de texto” por el superintendente de policía Wayne Humphrey, el avión descendió y tocó tierra de manera segura, deslizándose sobre la pista sin las ruedas habituales. La destreza del piloto y la cooperación de los pasajeros fueron clave en este aterrizaje excepcional.
Afortunadamente, los tres ocupantes del avión, incluido el piloto y sus dos pasajeros, un hombre de 60 años y una mujer de 65, resultaron ilesos. Los servicios de emergencia, entre ellos bomberos y paramédicos, estaban en alerta mientras el avión se preparaba para su aterrizaje.
La aeronave, propiedad de Eastern Air Services, con sede en Port Macquarie, será sometida a una investigación por parte de la Oficina Australiana de Seguridad en el Transporte para determinar las causas del incidente. Mientras tanto, el aeropuerto de Newcastle permanecerá cerrado durante 24 horas para evaluar cualquier daño en la pista, aunque las primeras indicaciones sugieren que son “superficiales”, según declaraciones de Humphrey.
Este evento, aunque inicialmente tenso y preocupante, terminó como un testimonio del profesionalismo y la habilidad de los involucrados. El piloto, el pasajero y los equipos de emergencia trabajaron en conjunto para garantizar un resultado seguro, destacando la importancia de la preparación y la calma en situaciones críticas en el mundo de la aviación.
