En un dramático episodio que tuvo lugar el pasado martes en Concordia, la imponente cruz de la iglesia Nuestra Señora del Valle, ubicada en la calle Tala al 1300, sucumbió ante la furia de una intensa tormenta que azotó la región. La estructura metálica, recientemente restaurada en homenaje al General Sal Martín, no resistió los vientos desencadenados por la tempestad, desprendiéndose de su base de hormigón.
La ciudad había sido advertida por el Servicio Meteorológico Nacional, que había emitido una alerta amarilla por tormentas para toda la provincia de Entre Ríos. La tormenta se desató alrededor de las 18 horas, acompañada de una espectacular actividad eléctrica y vientos provenientes del oeste.
En un impactante desenlace, la cruz se desplomó sobre un árbol cercano y las rejas de la institución religiosa. Las imágenes capturadas muestran la devastación, con el árbol destrozado por el peso de la cruz, que atravesó el tronco principal dejándolo astillado. La magnitud del evento refleja la violencia con la que la estructura metálica impactó contra su entorno.
Cabe destacar que la cruz había sido sometida a un proceso de restauración y embellecimiento apenas tres meses atrás, durante el fin de semana largo en conmemoración al General Sal Martín. En ese momento, una empresa privada dedicó maquinaria y personal para realzar la belleza de este ícono religioso, que ahora yace derribado por las inclemencias del tiempo.
Este inesperado suceso deja a la comunidad con un sentimiento de pérdida y desolación, recordándonos la fragilidad ante las fuerzas de la naturaleza, incluso para elementos que simbolizan la fortaleza espiritual de la ciudad. La reconstrucción de este símbolo emblemático se presenta como un desafío inminente, buscando restaurar no solo la estructura física, sino también el significado arraigado en la historia y la fe de Concordia
